El gigante chino ha presentado en Munich su terminal más potente, diseñado por Porsche, cuyo precio ronda entre los 699 y 1.395 dolares
La ocasión la pintan calva. Y con el Note 7 de Samsung fuera de escena, el segmento de los terminales profesionales de gama alta se había quedado cojo. Pero el hueco dejado por el gigante surcoreano ha durado poco tiempo. Otras firmas no menos gigantes, en efecto, se han apresurado a rellenarlo sin demora. Como Apple con su iPhone 7 Plus, cuyas ventas se han visto beneficiadas por el «pinchazo» de Samsung. O como Huawei con su nuevo Mate 9, presentado este jueves a bombo y platillo en Múnich.