Por Néstor Strübe*
Según datos de la Asociación de Empresas Chilenas de Tecnología (Chiletec), los ciberataques se han incrementado un 30% y siete de cada 10 pequeñas y medianas empresas, Pymes, no cuentan con las herramientas necesarias para enfrentar este desafío.
En ese escenario, se torna urgente la concientización en ese segmento, ya que la ciberseguridad dejó de ser un valor agregado. Hoy en día es una prioridad para las organizaciones de cualquier nivel y tamaño, por lo cual es importante abordarla con capacitación, recursos, estrategias y procesos.
Implementar las mejores prácticas de la industria para anticipar, resistir, recuperar y adaptarse a los eventos disruptivos que ponen en riesgo la actividad de la empresa u organización en el ciberespacio, es fundamental y la Pyme no está ajena a ello.
La ciberseguridad no puede ser vista como una temática para grandes expertos ni eminencias de la industria tecnológica, sino como un proceso real, que llegó para quedarse y que debemos conocer para mejorar nuestra calidad de vida.
Por lo mismo, lo primero que debemos lograr como sociedad es la concientización de cada uno de nosotros, informándose por los diversos medios acerca de lo que está ocurriendo en el ciberespacio, de las técnicas que están usando los ciberdelincuentes, de los impactos negativos generados a las víctimas. Debemos estar atentos a los consejos que nuestro ecosistema nos da como advertencia, como jamás compartir con nadie las credenciales que usamos en el ciberespacio y reconocer sin medias tintas que el ser víctimas de un ciberdelito no es comparativamente menor que entregar a delincuentes las llaves de la casa, del auto o incluso de la caja fuerte donde podríamos tener objetos de valor. Es lo mismo y de eso tenemos que hacernos cargo.
Los ciberdelincuentes evolucionan tan rápido como lo hace la tecnología, pero nosotros tenemos que ir un paso por delante. Ese es el llamado, a no decaer y mantener siempre el sentido de alerta activo en el ciberespacio.
Info – Ciberseguridad Latam